Amar nuestro propio cuerpo, habitar con satisfacción y agradecimiento la piel que nos ha tocado, vernos al espejo con dignidad, respeto, sensualidad y confianza… sin sumisión. Esa es la revolución de todas, la que hacemos todos los días.
Mujer: Ni Sumisa, ni devota, te quiero LIBRE, LINDA Y LOCA.
Árbol de mi alma
Más allá de los conceptos, de la significación de las palabras, de la descripción de una imagen que podría precisarme este para mí ha sido el hermoso ejercicio de recordar y honrar la huella de siete parejas que me trajeron a la luz, el árbol es para mi un tesoro, el conjunto de las energías que me llevan a estar aquí y ahora. Descubrirlo me ha llevado a descubrirme, desnudarme, manifestarme y al verdadero nacimiento. A ser semilla de luz que desea unirse hacia sus semejantes saliendo de la oscuridad , que se esfuerza como una planta para llegar hasta la luz y cumplir con el ideal que está inscrito desde lo más profundo del alma: Crecer.
Click y edición – Daniel Lozano