Fotografía, identidad y patrimonio
¿Pueden los objetos decirnos un poco de lo que somos?
Una piedra para partir panela, un sombrero, una flor, un fósil o una llave, nos permiten abrir una puerta al pasado, a nuestra historia. ¿Qué pueden decir los objetos de quién somos? ¡mucho!
Estas son las historias que se esconden tras los objetos preciados que escogieron algunos estudiantes de Arts Collegium en Guasca:
Sofia Acero Diaz
Piedra para partir panela
Siento que un objeto que define sin duda alguna nuestra idiosincrasia es la piedra que se utiliza para partir panela. Es un objeto casi emblemático para los colombianos, pues incluso hoy en día es casi imposible encontrar una familia que no tenga dicho tesoro. Creo que una de las costumbres que ha perdurado durante más tiempo es esa piedra.
Laura Valentina Rodriguez
Estos sombreros protegieron a mi abuelo del sol, la lluvia y el frio de la madrugada. Ha pasado por mi familia de generación en generación desde mi bisabuelo hasta mis padres.
Andrés Julián Velandia Intencipa
La llave data de 1.900 de la casa del bisabuelo de mi papá, de su primera casa, la casa donde él creció en la que entre ovejas y vacas los cultivos cosechaba, entre las montañas paramunas la ruana abrigaba. Esta llave siempre colgaba en el cordón de fique que sus pantalones apretaba, dentro de una arandela que al llegar a casa en la pared colgaba. Era la llave de la puerta principal, era colgada al lado de la llave de la habitación de los padres, la cual estaba bajo el cargo de la sra. Garzón de Velandia, esposa de Jorge Velandia. La independencia de llaves era lo que se acostumbraba pues en caso de una perdida, una copia era imposible tanto económica como cultural y social así que cada uno la guardaba.
Esta llave fue heredada hasta llegar a mí 118 años después. Hoy en día esa casa está en ruinas y le pertenece a un primo lejano de mi padre, abuelos y bisabuelos que crecieron allí educados en pro de cuidar el campo.
Hoy en día se mantiene la independencia de esas dos llaves que mi padre me heredó, que ya no abre una puerta, abre la historia de mi casa, de mis tradiciones, de mis raíces, campesinas de agricultor hilador y tejedor de nuevos horizontes donde conservemos lo que somos, fuimos y seremos, hijos del campo y de la tierra.
Lina Pedraza
Esta totuma se ha conservado por varias generaciones, en especial por mi abuela quien me contaba que la guardaba con mucho cariño porque perteneció a su padre, heredada a su vez de mi tatarabuelo. El abuelo la llevaba enganchada en su saco o chaleco los días domingos o festivos donde compartían la chicha especialmente en las cabalgatas. La conservamos como una reliquia y por el valor sentimental de haber pertenecido a nuestros abuelos y la exhibimos en la chimenea de la casa que perteneció a mi abuela.
Mensajeros de Vida y Conservación se realiza en Guasca con el apoyo del Ministerio de Cultura Programa Nacional de Concertación y Conservación Internacional Colombia:
